Una de las grandes carencias editoriales que arrastramos todos los que no nos sentimos identificados con lo políticamente correcto es la ausencia de un medio de comunicación que permita agrupar ideas y novedades generalmente apartadas como apestadas del común de las publicaciones existentes.
Si bien internet vino a paliar un tanto esta situación con la abundancia de muchas y buenas publicaciones online (piadosamente correremos un tupido velo sobre otras experiencias de dudoso origen y finalidad aun más incierta), el papel, la ausencia de la taumatúrgia de lo impreso, seguian siendo una debilidad manifiesta.
Pues bien, alguna luz nos permite empezar a ser optimistas. Y esta luz tiene un nombre: Disidencias. No se trata de una experiencia realmente nueva: es un proyecto retomado de hace veinte años, pero esto, lejos de ser una rémora, es una ventaja: la experiencia editorial, la sensatez vital y el saber que charcos hay que esquivar, permiten pensar que los vientos pueden ser más favorables en esta ocasión, lo que deseamos desde este humilde rincón de internet con todo el cariño.
No piensen que es un panfleto con cuatro mamarrachadas grapadas. Las firmas de peso y prestigio (Gustavo Bueno, Guillermo Rocafort, Adriano Scianca, Alberto Buela...) el tamaño, prácticamente un libro, y su factura de calidad la hacen candidata a ser una revista de anaquel, dispuesta para ulteriores consultas pasados los años. Y el precio, diez euros, es prácticamente un regalo, dadas estas características y periodicidad, nada discordante de lo que en los kioscos podemos encontrar, salvedad hecha de la basura mediática con grandes tiradas y padrinos de mirada turbia (leanse Intervíu, Tiempo, El Siglo, El Temps o experimentos supuestamente católicos plagados de protestantes y ultraliberales dispuestos a enterrar la Cruz en lo más profundo. Dejemos de lado que analizados sus contenidos, en calidad y cantidad, desde luego, no es gravosa, y sean sus padres quienes nos la presenten. Recientemente, lo hicieron en el programa La piel de toro de radio Intercontinental, de Madrid, programa magistralmente dirigido por Norberto Pico, donde presentaron el número uno el director, Juan Antonio Aguilar, y el editor, Miguel Ángel Vázquez, ya referencia con eco en esta página.
Escuchémoslos pues.
2 comentarios:
La grabación se escucha a mayor velocidad de la normal, y no se entiende nada.
Sería muy intetresante poder escuchar la presentación o un fragmento de la misma.
Un saludo.
Es cierto. Al subirla, se advertia por parte del servidor de la posibilidad de que durante "unos minutos" se escuchara mal la grabación, por estar sin "codificar".
Pero ya han pasado unas horas y parece, sigue pareciendo, más una conversación de pitufos (no por lo azul, sino por lo incomprensible) que de personas.
Trataremos de enmendar el error, si la técnica nos ilumina.
Lamentamos el inconvenite: es lo que tiene la bisoñez, son nuestros primeros pasos por el mundo de los blogs o bitácoras.
Un saludo desde el mundo de las palabras.
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